martes, 18 de marzo de 2008
La trastienda de la vida
Siempre me han gustado las ventanas y los balcones. Parecen que hablan si uno se detiene a observar. A veces mirando imagino cómo son las personas que viven dentro, trato de adivinar sus gustos y sus vidas. Hay ventanas que hablan de pobreza y otras de soledad. Me gustan sobre todo los que tienen puntillas y un montón de tiestos llenos de flores. Sospecho que dentro sus habitantes son románticos, y que aman con pasión la vida.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario