lunes, 1 de septiembre de 2008

POBRE NIÑA


Hace pocos días visité Santiago. Me encantan sus calles y sus gentes. Sobre todo pasear sin pensar en nada, sólo dejandose llevar. Allí parece que el tiempo se detiene y apetece charlar en un bonito rincón para organizar nuestro armario interior. Sin prisas...haciendo un alto en el camino.
Sin embargo no logro entender ciertas situaciones. Dentro de la catedral una niña llamó mi atención, allí estaba ella hablando con un sacerdote. Por supuesto, " se estaba confesando " y yo me pregunté qué podía haber hecho para estar allí ,y pedir perdón. ! pobre criatura !

No hay comentarios: